La debacle continúa y parece no tener fin.
Grandes enfrentamientos entre el régimen y la insurrección han convertido al mundo en el escenario de una guerra más allá de la comprensión de la humanidad. Y cada uno de los protagonistas muestra su interior de una manera más intensa en cada ocasión.
Toda la saga de Injustice no es otra cosa que una distopia con superhéroes. Y aquel que ha sido el emblema de la esperanza de la humanidad, aquel que es más rápido que una bala, muestra su quintaesencia en medio de la crisis… imponiendo su voluntad.
El caballero oscuro se mantiene en contra del régimen, intentando hacer que su ética prevalezca a pesar de la imposibilidad de lograr un cambio verdadero.
Esta historia me ha parecido intrépida. Está llena de acción y me ha mantenido al borde de la expectativa. Todo el desarrollo ha estado muy bien argumentado y considero que es una pieza digna a considerar para todo aquel que quiera conocer el universo DC.
El final de la historia puede dejar algún sin sabor, pero esto es normal, no es un cuento de hadas. Además, creo que es digno de un relato que ha hecho una gran apuesta por cambiar la estructura canónica de la trinidad de superhéroes DC, dejándonos en un bucle que puede llevarnos al infinito.
